Amarilla agregó que los voceros del oficialismo no se animarían a decir “cuántos disparates hemos escuchado en estos días” y sobre todo ejecutar las acciones “tan apestosas”, como la supuesta renuncia de Friedmann, si no tuviese el guiño del jefe de Estado.
Destacó que el titular del Ejecutivo no va a para en su intención de instalar un gobierno autoritario en el Paraguay e indicó que Cartes debe tener en cuenta que “aquí estamos gente que le vamos a resistir, y no solo eso, sino que le vamos a vencer”.
Sostuvo además que en el país “hay una guerra sin cuartel, con el Ejecutivo al frente”, procurando descabezar la institucionalidad de la República y eligieron como banco de prueba la Gobernación de Guairá, donde indicó que es evidente el atropello y la grosería con que actúan lo que pretenden instalarse en el lugar de Friedmann.
"Nadie puede darle crédito ni veracidad a la manera en que actuaron los que quieren instalarse en la Gobernación. Como simples ciudadanos no podemos permitir que se atropelle la institucionalidad de la República", sentenció.