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Las autoridades del condado de Maoxian comunicaron que el suceso se produjo después de que se deslizara una parte alta de una montaña que cayó sobre la aldea de Xinmo, en torno a las 6.00 de la mañana (hora local).

Inicialmente, la agencia estatal Xinhua informó de que al menos 140 personas estaban desaparecidas, pero posteriormente rebajó esta cifra a "más de 120" sin precisar si el resto de personas fueron rescatadas. La agencia sí precisó que tres miembros de una misma familia fueron rescatadas cinco horas después del desprendimiento de tierra y fueron trasladadas a un hospital sin heridas graves. Otro hijo de la familia permanece enterrado en la casa.

Al menos 62 casas quedaron enterradas por el deslizamiento de tierra. Dos kilómetros del curso en un río y 1.600 metros de una carretera están sepultados por las rocas. El Gobierno local informó de que el desprendimiento se produjo por las intensas lluvias que han caído en la zona. Según informó el portavoz del Gobierno provincial de Sichuan, Tang Limin, un equipo de rescate con más de 1.000 efectivos se trasladó a la zona con excavadoras y un instrumento de detección de vida.

El Gobierno provincial ha puesto en marcha el nivel más alto de respuesta de socorro en caso de desastre. El presidente, Xi Jinping, ha ordenado que se pongan todos los esfuerzos en el rescate de los posibles supervivientes. "Las autoridades deben esforzarse al máximo para reducir las bajas y prevenir desastres secundarios", ha dicho Xi, quien ha añadido que los desaparecidos y los que sufran pérdidas por el desastre "deben recibir el cuidado apropiado".

Imágenes difundidas por la televisión oficial CCTV muestran a varios soldados levantando pesadas rocas y a varias excavadoras trabajando en la zona donde estaba el pueblo, que presumiblemente ha quedado sepultado. La Radio Nacional de China informó de que los equipos de rescate detectaron señales de vida, entre ellas, la voz de una mujer.

En esta época del año son frecuentes las lluvias torrenciales en China y es común que se produzcan inundaciones, desprendimientos y otras catástrofes motivadas por fenómenos meteorológicos.

Según informa este sábado Xinhua, en las provincias de Hunan y Hubei, en el centro de China, las inundaciones provocadas por las lluvias de los dos últimos días han afectado a unas 466.500 personas. Medio centenar de casas se han derrumbado, por lo que más de 9.000 personas han tenido que ser evacuadas.

Fuente El País