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El ya exjugador del Guangzhou Evergrande chino tendrá una claúsula de 120 millones de euros, tres veces lo que el club azulgrana ha pagado por él.

Paulinho es el tercer fichaje que realiza el Barça este verano después de las incorporaciones de Gerard Deulofeu y Nélson Semedo. En total, la cantidad que ha gastado la entidad culé en fichajes asciende hasta los 82 millones de euros y seguirá subiendo en los próximos días, ya que trabaja en las incorporaciones de Coutinho y Dembélé, entre otros.

El internacional brasileño, que hace dos años abandonó el Tottenham para irse a China a cambio de 14,5 'kilos', eleva la nómina de centrocampistas a disposición de Valverde hasta 10. Habrá salidas por fuerza y no se descarta que haya más entradas en esta línea del equipo.

El Barça ha estado todo el verano con Paulinho en la agenda. En julio negoció sin éxito con el Guangzhou para bajar el precio de la cláusula. Llegó a ofrecer más 25 millones por el brasileño, pero el club chino se mostró inflexible a la hora de desprenderse de su mejor futbolista.

Finalmente, una vez las arcas azulgranas han ingresado los 222 millones que dejó la salida de Neymar, y en vista de que el principal objetivo para la medular, Verratti, es imposible por la constante negativa del PSG, Bartomeu ha accedido a abonar los 40 'kilos' que pedían por el jugador.

Pese a las críticas que ha despertado su fichaje por el Barça, Paulinho es un fijo para Tite en la selección brasileña gracias a su potencia física y su sentido vertical del juego. Aporta buenas cifras goleadoras desde segunda línea y es muy fiable en la presión.

No obstante, no es un medio hábil en la gestión del balón. Los 40 millones de su traspaso lo colocan como el cuarto traspaso más caro de la historia del Barça, sólo superado por Luis Suárez, Neymar e Ibrahimovic. En pocos días, salvo sorpresa, pasará a ser el quinto.

Fuente MARCA