El dúo francés de salto base conformado por Fred Fugen y Vince Reffet (conocidos como Soul Flyers) llevaron el 'wingsuit' a un nuevo nivel al lanzarse desde la cima de la montaña Jungfrau, de 4.062 metros de altura, en los Alpes berneses, y entrar por la puerta de una avión ligero Pilatus Porter, de 1,58 metros de ancho y 1,25 de alto

"Queríamos celebrar el vigésimo aniversario del logro de Patrick de Gayardon en 1997, cuando saltó de un avión con un traje aéreo y luego voló de vuelta al avión. Fue un pionero en nuestra actividad y queríamos reproducir su truco", afirmó Reffet a Red Bull, que patrocinó la gesta.

Los hombres pasaron por un entrenamiento agotador para lograr esta increíble proeza, algo que incluyó intentos fallidos y lesiones. En total, llevaron a cabo 20 vuelos de prueba en la avioneta antes de realizar el truco desde la montaña. "Fue una locura. Estás a 4.000 metros, saltas ¡y eso es todo! Empiezas desde el punto A y terminas en el punto B en un avión", contó Reffet.

"Estamos acostumbrados a saltar desde el avión, pero aquí debes entrar en él. Estás cayendo y de repente ya no hay aire. La sensación es bastante extraña", graficó el saltador, y agregó que "cuando estás en el avión y ves a tu amigo volando cada vez más cerca, es increíble".