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Por aproximadamente una hora, los cinco detenidos en una estancia ubicada en José Leandro Oviedo, Itapúa, prestaron declaraciones esta mañana ante el fiscal Marcelo Pecci, en la Unidad Especializada de Lucha contra el Narcotráfico. 

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Al terminar de declarar, el único argentino detenido, Juan Carlos Balmacedas (43), relató ante la prensa que es de Buenos Aires y lleva apenas 20 días en nuestro país. Aseguró no tener nada que ver con la droga incautada.

“Me fui a jugar piki y me quedé un día nomás”, alegó y agregó que el dueño de la propiedad es su “conocido de piki”. También dijo desconocer a los demás detenidos.

Por su parte, Benigno Daniel Chávez (38) indicó que es la casa de “una amiga” y casualmente fueron a hacer deportes y quedaron a dormir en el lugar. Confirmó que estaba al tanto de la orden de captura que pesa en su contra también por narcotráfico. “Estaba esperando el momento para entregarme. Me estaba preparando. Ya estaba hablando con mi abogado para eso”, argumentó.

Chávez se encontraba prófugo desde el año 2014, cuando la Policía allanó su casaquinta de Encarnación y desmanteló un laboratorio donde cada día se cocinaban 50 kilos de cocaína boliviana. Uno de sus hermanos está preso por narcotráfico en Argentina.

Ramon Ignacio Vera, de 19 años, comentó que es tractorista y solo estaba en la hacienda cumpliendo labores para las que lo contrataron hace aproximadamente tres meses. Consultado respecto a quién lo contrató, se limitó a responder que fue “un amigo”.

Igualmente, José Rubén Moreno Martínez (27) dijo que es estanciero y trabaja en el lugar también desde hace alrededor de tres meses. Al igual que Vera y los demás detenidos, también negó estar involucrado con el cargamento incautado.

El otro detenido es el encarnaceno Eduardo Vargas Laupichler (31), quien evitó dar declaraciones ante la prensa. 

La avioneta que aparentemente descargó los 448 kilos de droga, así como otras seis sospechosas, fueron localizadas en San Pedro en un hangar cuya propietaria es Juana Carolina Vera González, esposa de Víctor Raúl D’Ecclesiis Giménez.

Este último es hermano del diputado colorado Freddy Tadeo D’Ecclesiis Giménez. El parlamentario señaló ayer que “jamás” ha tenido ninguna vinculación con el narcotráfico.

Fuente ABC