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“Con humildad, aceptando quien tiene en el corazón la voluntad de construir un Brasil mejor, buscaremos en los próximos años restaurar el sentimiento familiar hace mucho desgastado en nuestra sociedad, así como la paz dentro de nuestros hogares”, dijo el futuro jefe de Estado en su cuenta de Twitter.

A una semana de su investidura, Bolsonaro, líder de la extrema derecha brasileña y ganador de las elecciones presidenciales celebradas en octubre pasado, destacó que la Navidad es un “momento especial” en el que “recordamos con nuestras sagradas familias el nacimiento de Cristo”.

“Es con ese sentimiento, inspirado en la familia simple que recibió en una humilde cuna la encarnación del propio Dios, que contemplamos la llegada de un nuevo Brasil”, expresó el mandatario electo.

Bolsonaro, quien asumirá la Presidencia el próximo 1 de enero, pasará las fiestas navideñas en la base naval de la Restringa de la Marambaia, una instalación de la Marina en el estado de Río de Janeiro y que posee una paradisíaca playa reservada con acceso restringido que ha sido aprovechada como lugar de descanso por la mayoría de los presidentes brasileños.

El futuro mandatario viajó a las instalaciones el sábado acompañado por su hijo Carlos, uno de sus principales consejeros durante la carrera presidencial, mientras que su esposa, Michelle Bolsonaro, y su hija pequeña llegarán este mismo lunes.

Está previsto que Bolsonaro regrese el próximo jueves a Río para preparar el encuentro que mantendrá con el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, quien además ha confirmado su asistencia a la ceremonia de investidura del sucesor del actual presidente, Michel Temer.

El ultraderechista ha expresado su intención de estrechar las relaciones con Israel y ya ha transmitido su deseo de trasladar la embajada de Brasil de Tel Aviv a Jerusalén, siguiendo los pasos de Estados Unidos, lo que provocó malestar entre los países árabes y podría amenazar las relaciones comerciales del gigante sudamericano con la comunidad árabe. (EFE)