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Durante el desarrollo del Juicio Oral y Público, la representante del Ministerio Público produjo diversos elementos probatorios que fueron ofrecidos en tiempo y forma, tales como: El informe policial, el acta de procedimiento, los diagnósticos médicos de las señoras Salvadora Aponte Aguilera, Mercedes Aponte y el informe socio-ambiental. 

Refieren los antecedentes, que el 4 de diciembre del 2017, a las 00:00 aproximadamente, Arnaldo Arévalos Samudio llegó de sorpresa con un arma blanca (machetillo) en mano a la casa de su ex pareja de nombre Salvadora Aponte Aguilera, ubicada en Puerto San Roque, distrito de San Pedro del Ycuamandyyú.

En la ocasión, el sujeto le mencionó a la mujer que tenía conocimiento de que la misma se encontraba en pareja con otra persona, que sabía quién era y que habría intercambiado mensajes de texto con él (día atrás el hombre ingresó a la fuerza hasta el domicilio de la mujer y sustrajo su aparato celular). El mismo ya la había amenazó con matarla, si ella estaba en pareja con otro sujeto. 

En ese momento se encontraba en el lugar la hermana de la víctima identificada como Mercedes, quien al percatarse de la presencia de Arévalos Samudio, intentó con su novio despojarlo del arma blanca, en ese instante el agresor huyó a bordo de una motocicleta, perteneciente a su exconcubina. 

El mismo día, pero horas después el hombre volvió a la vivienda cuando se percató de que ambas mujeres y los niños se encontraban durmiendo, sin protección de otra persona. 

El procesado entró al dormitorio con un destornillador en mano e intentó matar a Salvadora Aponte Aguilera, provocándole heridas en la zona del pecho y el brazo izquierdo. Además, la agredió en la pierna, los brazos, manos y labios. Asimismo, el agresor le produjo diversas heridas a Mercedes Aponte en el cuello, brazos, hombros y espalda. 

En el sitio estaban presentes los hijos menores de Arévalos Samudio y Salvadora Aponte de 7, 4 y 1 año, quienes presenciaron los actos de violencia cometidos por su progenitor. Las víctimas pidieron ayuda y fueron auxiliadas por un primo de las mujeres, quien llegó a la casa y logró que el hombre abandone el lugar.  

Fuente Ministerio Público