Vilmar Acosta llegó de Brasil bajo extrema medida de seguridad.

Narcotraficantes, algunos senadores y diputados, además de efectivos policiales estarían detrás del plan de asesinato de Vilmar “Neneco” Acosta, con el objetivo de evitar que revele informaciones referentes a la narcopolítica y la vinculación de altos jefes de la Policía con el tráfico de drogas.

Las autoridades del Ministerio de Justicia y Trabajo extremaron las medidas de seguridad en torno al exintendente de Ypejhú, quien el miércoles de la semana pasada ingresó a la Penitenciaría Nacional luego de ser extraditado del Brasil.

Según los datos suministrados por los responsables de la seguridad del político colorado, en varias ocasiones se realizaron sondeos sobre su ubicación en el penal, además de otros datos que despiertan las sospechas de un plan de asesinato en su contra.

Ante esta situación, al menos cuatro guardiacárceles lo vigilan permanentemente y evitan que consuma la comida que reciben los demás reclusos, a fin de evitar envenenamiento.