Issa Hayatou, presidente interino de la FIFA en la apertura de la rueda de prensa.

Tras las detenciones de 12 dirigentes en un hotel de Zúrich, entre los que se encontraban el paraguayo Juan Ángel Napout (presidente de la Conmebol) y el hondureño Alfredo Hawit (Concacaf), representantes de la FIFA encabezaron una conferencia de prensa para anunciar las reformas con las que planean eliminar la corrupción del fútbol mundial.

"Lo ocurrido muestra la necesidad de reformas", advirtió el camerunés Issa Hayatou, actual presidente interino del organismo en la apertura de su discurso. De la rueda de prensa también participan Markus Kattner, secretario general que reemplazó a Jerome Valcke, François Carrard, presidente del Comité de Reformas creado para eliminar la corrupción, y Moya Dodd, miembro por Asia del Comité Ejecutivo.

Consultado sobre si las detenciones de Napout y Hawit ofuscarian las reformas propuestas por la FIFA, Hayatou explicó: "La FIFA no controla los tribunales que están llevando a cabo las investigaciones. Sólo porque los tribunales hacen investigaciones no significa que no podamos seguir adelante con nuestras reformas. No tenemos autoridad sobre la Justicia de Estados Unidos y Suiza."

La introducción de Hayatou dio paso a la palabra François Carrard, el elegido para liderar el grupo de 14 personas que llevan a cabo el proceso de reformas de la FIFA, quien ya tiene la experiencia de haber sanado al Comité Olímpico Internacional (COI) tras el escándalo en la elección de Salt Lake City como sede de los Juegos de Invierno de 2002.

"La FIFA atraviesa una gran crisis, pero esta crisis es una oportunidad única para emprender el cambio y empezar una nueva era", deseó Carrard.

Entre otras medidas, el suizo de 77 años resaltó que el Comité Ejecutivo aprobó "por unanimidad" la propuesta de un máximo de tres términos de cuatro años para ser presidente o miembros del Consejo de la FIFA, es decir, que nadie permanecerá más de 12 años en su silla.

Además, los aspirantes a los cargos de la FIFA estarán sometidos a comprobaciones de integridad antes de asumir un empleo y también habría por lo menos una representante femenina en el Consejo de la FIFA por cada una de las seis confederaciones continentales.

El paquete de reformas se someterá al voto de las distintas federaciones nacionales en el Congreso extraordinario del 26 de febrero, donde se elegirá también al sucesor del presidente Joseph Blatter.