Patricio Escobar Cáceres, militar y político paraguayo que llegó a la presidencia de la República en 1886. GENTILEZA @bolliconpatas

La diputada colorada Del Pilar Medina presentó en la Cámara Bajada el proyecto de ley “que dispone el traslado de la urna con los restos del héroe militar, líder político y presidente de la República, general Patricio Escobar Cáceres, al Panteón Nacional de los Héroes”. La congresista considera que será de absoluta justicia, teniendo en cuenta el servicio que prestó a la patria.

“Fue un hombre al que le cupo en suerte servir en los tiempos más turbulentos y vertiginosos de nuestra historia como nación. Un campesino que llegó a ser Presidente del Paraguay y que formó parte del entorno más cercano del Mariscal López, lo que le permitió presenciar y protagonizar numerosos acontecimientos durante la Guerra Contra la Triple Alianza”, menciona parte de la exposición de motivos que acompaña el proyecto de ley.

La diputada destacó que el Gral. Escobar fue un hombre a quien se le encomendaban las misiones confidenciales, por su porte sereno, prudente y cauteloso.

“Era el consejero paternal y oportuno; actuó con arrojo y denuedo en numerosos encuentros, como lo atestiguan las gloriosas cicatrices que cubrían su cuerpo; fue el prototipo del soldado paraguayo que resistió al invasor durante la Guerra Grande; modesto de verdad, de una austeridad no conocida en estos tiempos, era modelo de virtudes ciudadanas y de valía cívica y moral”, dijo Medina.

La diputada considera que el general Patricio Escobar fue un hombre ejemplar por su gran patriotismo, que merece mucha mayor admiración por parte del pueblo paraguayo, mayores recordaciones y homenajes por su inmenso e inapreciable aporte a nuestro país.

RESEÑA DE ESCOBAR

Los datos históricos refieren que Escobar nació en 1843 en el paraje denominado Caáguy-Ruguá de San José de los Arroyos, y que se alistó en la milicia a los 21 años. Actuó en la batalla de Estero Bellaco, combatió en Tuyutí, luchó luego en la de Sauce Boquerón y posteriormente en Curupayty, donde fue ascendido a  Teniente Graduado o Alférez

Después de recibir este ascenso prestó servicios en el Gran Cuartel General de Paso Pucú, habiendo sido designado Ayudante de Campo del Mariscal Francisco Solano López.

Entre las misiones arriesgadas que le cupo desempeñar se citan la construcción, en el perentorio plazo de una noche, de una trinchera entre las posiciones que ocupaban los ejércitos aliados, en el paraje denominado “Espinillo”, el cruce de todo el campo de batalla en Tuyutí, que le valió su ascenso al grado de Capitán en el cuartel general de San Fernando, la misión de llevar al Coronel Martínez la orden de evacuación definitiva de Humaitá, plaza que se encontraba totalmente sitiada, misión al Chaco paraguayo para cerciorarse de la dirección de marcha que llevaba el enemigo, así como sus efectivos y estado sanitario.

“Luego de la misión en el Chaco vino su ascenso a Sargenteo Mayor, rango con el que realizó el heroico pasaje a Ypecuá, para rescatar a compatriotas heridos. Regresó de la misión con once heridas en el cuerpo y el brazo izquierdo en cabestrillo, con la mano destrozada, para presentarse en Azcurra, donde fue visitado por el Mariscal y donde recibió de manos del mismo la condecoración de “Caballero de la Orden Nacional del Mérito” y su despacho de Teniente Coronel fechado el 8 de enero de 1869”.

El documento menciona que en Cerro Cora, cayó prisionero el 1° de marzo de 1870, y tras la muerte del Mariscal López, fue conducido a Rio de Janeiro.

Ya en la postguerra fue ascendido al grado de General de Brigada el 16 de julio de 1874, por decreto firmado por el presidente de la Republica, Salvador Jovellanos, y a General de División el 6 de julio de 1876, firmado por el Presidente Juan Bautista Gill.

LOGROS DE SU PRESIDENCIA

Fue el único ciudadano que ocupó la cartera de Guerra y Marina en cinco gobiernos constitucionales.

Corono su carrera de servicio público con la asunción a la Presidencia de la República en el quinto periodo constitucional, desde el 25 de noviembre de 1886 hasta el 25 de noviembre de 1890.

Durante su gobierno se fundaron los partidos tradicionales de nuestro país, el Centro Democrático y la Asociación Nacional Republicana, con lo que se consolido un cambio en la forma de hacer política en el país, estableciéndose dos idearios políticos bien delineados y diferentes con sus respectivas visiones y propuestas para gobernar y administrar el país.

También bajo su gestión gubernativa se fundaron la Universidad Nacional y la Biblioteca Nacional, dando la posibilidad de acceso a una institución de educación académica de nivel superior y un encomiable archivo de libros y materiales de consulta, fomentando así la cultura y los recursos para la educación de jóvenes universitarios en el Paraguay.

El general Escobar falleció el 19 de abril de 1912.

“Por estas y otras consideraciones, considero necesario que la República del Paraguay otorgue mayor realce y reconocimiento a las grandes figuras de su historia, que aportaron de manera inmensa para la conformación de la Identidad nacional; esta figura de envergadura y de méritos indiscutibles, símbolo ejemplar del soldado paraguayo y líder político de la Nación, merece este reconocimiento”, refirió la diputada Medina.