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“El proceso electoral ya culminó y tanto los intendentes, gobernadores  y el presidente tenemos la obligación de traer progreso para nuestra gente”, reiteró este lunes durante la inauguración de 45,23 km de tramo asfaltado que conecta a las ciudades de Tobatí, Caacupé y Eusebio Ayala.

En ese contexto, pidió dejar de lado las peleas y trabajar en un modelo único en beneficio de los sectores más vulnerables. “Debemos trabajar para construir y no para dividirnos entre nosotros”, abogó.

Teniendo en cuenta el contexto actual, Abdo Benítez remarcó la necesidad de encarar acciones conjuntas que no estén orientados a itinerarios electorales futuros, sino de asumir la responsabilidad de servir a la nación.

“No podemos enfrentarnos, debemos terminar esa historia de izquierda- derecha, el debate ideológico es obsoleto. Hoy necesitamos creatividad para solucionar los problemas y unir las fuerzas de una gran nación para salir adelante”, indicó.

Luego hizo hincapié en que la infraestructura vial tiene un gran impacto, principalmente en las comunidades del interior del país, ya que se traducen en mayores oportunidades de desarrollo.

“Cuando la gente reclama mayores resultados en todas las áreas, significa que hay confianza, porque ese es uno de los principales desafíos, el de reconstruir confianza entre autoridad y pueblo”, añadió.

En esa misma línea, el presidente remarcó que seguirán trabajando para responder a las necesidades de la ciudadanía.

Indicó, nuevamente, que el proceso electoral ya culminó y que este es el momento de rendir cuentas a cada uno de los paraguayos sobre la gestión desarrollada en los últimos dos años.

Al respecto, admitió que es imposible cumplir con todos los requerimientos del país, no obstante aseguró que su administración está concretando logros emblemáticos, cuyos números son auditables.

Sostuvo que pese a la serie de inconvenientes que tuvo que sortear, se tienen récords históricos en obras públicas, inversión en el área eléctrica, sanitario y con avances en el sector energético.

Asimismo el jefe de Estado reconoció al sector privado por el esfuerzo realizado para que las medidas sanitarias contra el coronavirus impacten lo menos posible en la economía, en la protección de los 85.000 puestos de trabajo y evitar el despedido de su personal durante la vigencia de los protocolos sanitarios.

“Vemos con mucha satisfacción que este sector posibilitó que el Paraguay sea el de menor impacto en toda su economía a nivel Mercosur”, relató al tiempo de resaltar el gran trabajo realizado por el Ministerio de Obras Públicas conjuntamente con las empresas constructoras que culminaron muchas obras antes de lo previsto en el cronograma.

Por otro lado, el gobernante se refirió a las obras inauguradas en la fecha en el departamento, que incluyeron la planta de la Essap, viviendas sociales y los más de 45 km de tramos asfaltados, que en su conjunto requirió una inversión que supera los 80.000 millones de guaraníes, según precisó.

En relación a la construcción de viviendas sociales, señaló que fue otro de los elementos determinantes para que la economía siga operando durante la pandemia, que permitió retener muchos empleos.

Sobre el punto, renovó el compromiso de seguir priorizando la industria nacional al momento de la edificación de las soluciones habitacionales que viene realizando el Ministerio de Urbanismo, Vivienda y Hábitat (MUVH).

“Tenemos que fortalecerle a los trabajadores de este país, a los que invierten, generan puestos de trabajo en este país”, subrayó.

Por último, afirmó que con trabajos y resultados hará frente a las críticas. “Ayúdenme a seguir trabajando para generar desarrollo para la Nación”, concluyó.

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