La VoZ digital | Criminal negociado: Detectan feroz esquema de supuesta tragada con leche para niños desnutridos

2016-03-14 | 09:00

MINISTRO ANTONIO BARRIOS ORDENÓ AUDITORÍA EN EL INAN POR PRESUNTO COLOSAL ROBO AL ESTADO

Criminal negociado: Detectan feroz esquema de supuesta tragada con leche para niños desnutridos
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La investigación de la Revista Zeta evidencia un presunto colosal negociado con leche enriquecida en el marco de un programa de asistencia a niños desnutridos y madres embarazadas. La investigación de la Revista Zeta evidencia un presunto colosal negociado con leche enriquecida en el marco de un programa de asistencia a niños desnutridos y madres embarazadas.
Un escandaloso y criminal esquema de un supuesto multimillonario negociado con leche enriquecida en el marco de la ejecución de un programa para asistir a madres embarazadas y niños desnutridos del país habría sido detectado en una auditoría practicada en el Instituto Nacional de Alimentación y Nutrición (INAN) por el Ministerio de Salud Pública, cuya directora es la Dra. Laura Beatriz Mendoza de Arbo, una de las principales presuntas responsables. Gran parte de los lotes no habrían sido entregados y el incumplimiento fue “maquillado” en los papeles, de acuerdo con la investigación que se halla en pleno desarrollo. También se incurrió en severas inconsistencias entre los documentos proveídos por el INAN referentes a las recepciones de los productos, ya que aparentemente, los formularios estatales que debían ser rubricados por funcionarios de Salud con rango de declaración jurada, estaban nada menos que en poder de una empresa, algo considerado ilegal y aberrante desde el punto de vista jurídico, publica la Revista Zeta en su edición impresa de marzo.

La auditoría de gestión al “Programa Alimentario Nutricional Integral” (PANI) del Instituto Nacional de Alimentación y Nutrición (INAN) fue practicada al ejercicio fiscal 2014 y primer semestre del ejercicio fiscal 2015, conforme a lo establecido en la resolución N° 356/15. Se habla de la ejecución de un presupuesto superior a la friolera suma de más de 50 mil millones de guaraníes.

Una de las primeras graves irregularidades detectadas en el marco de la investigación impulsada por el equipo de auditores tiene que ver con el ítem 3 de un informe final, que se describe como “Documentos de la Institución en poder de la Empresa adjudicada”, en la que añade una recomendación que describe que “El INAN en lo sucesivo deberá contar en todo momento con todas las documentaciones que acrediten las recepciones efectivas de la leche en los servicios de Salud. Además deberá implementar mecanismos para la elaboración, impresión de Actas de Recepción por lo que se deberá ajustar y/o modifica el Pliego de Bases y Condiciones, en este punto, en atención a que dicho documento (Acta de Recepción) es institucional”.

Según los auditores, las llamadas actas de recepción son documentos irrestrictamente internos del INAN, y de acuerdo con los datos a los que accedió Zeta Investiga, cada entrega de las cargas de leche enriquecida deben ser avaladas por tres funcionarios estatales responsables de registrar en un documento el recibimiento del bien, en este caso, el insumo proveído por cada firma o empresa adjudicada para el suministro del producto.

Lo grave de lo comprobado en la auditoría es que las entregas no están debidamente certificadas por funcionarios del INAN, pese a que la recepción y la confirmación del acto tiene carácter de “declaración jurada”, lo que significa que la entrega de la leche tiene que ser inequívocamente registrada en el citado “acta de recepción”.

Y precisamente esos documentos fueron hallados en poder de responsables de una empresa privada, algo ilegal desde todo punto de vista, y peor aún, elemento que hizo reforzar las presunciones de que dichas actas fueron llenadas a “antojos” de la citada firma para “maquillar” el suministro de la leche, que probablemente nunca existió. La investigación abarca un proceso de adjudicación para proveer de leche enriquecida dentro del programa PANI a madres embarazadas y niños desnutridos de las distintas regiones del país.

En otro apartado “se recomienda que los responsables del INAN-PANI deberán implementar medidas estrictas de control a efectos de regularizar la disparidad y concordancia de las documentaciones con carácter de Declaración Jurada. Además esta Dirección General elevará la situación presentada a la Dirección General de Asesoría Jurídica a los efectos de deslindar responsabilidades”, señala el documento de la Auditoría, la cual, en términos administrativos, evidencias una serie de irregularidades en que las autoridades del INAN incurrieron posiblemente en el proceso de la maniobra para tratar de “disfrazar” el descomunal robo descubierto y que podría derivar en una investigación formal del Ministerio Público por lesión de confianza.

ENTREGAS, LA MAYORÍA “FUERA DE HORARIOS”
Independientemente al supuesto negociado detectado y a los detalles de la maniobra implementada posiblemente en un intento por ocultar un “agujero” que podría ser mucho mayor, la auditoría confirmó que los productos, o sea la leche enriquecida, fueron entregados en horarios no adecuados, es decir, no previstos dentro de los contratos. Y en el ítem 5, no sólo se habla de esta anomalía, sino que directamente se invoca que la lecha “no fue entregada”.

En ese sentido, detalla “el incumplimiento de entrega de leche en polvo enriquecida en los servicios donde se implementa PANI, fuera del horario estipulado en el contrato”. Inmediatamente, la auditoría recomendó que “en lo sucesivo, el INAN-PANI deberá implementar mecanismos efectivos de control en lo referente al cumplimiento estricto de las entregas por parte del proveedor”.

LA RECEPCIÓN, “POR PERSONAL NO AUTORIZADO”
La vergonzosa y burda maniobra para supuestamente robar al Estado no conoce de límites. En el ítem 6 del informe de auditoría, se detalla que en un caso concreto hubo una seria falencia porque la leche fue recibida por “personal no autorizado”.

Esta situación fue descubierta en el Centro de Salud de Ypacaraí, donde “la recepción de leche fue por personal no autorizado”, por lo que se desprende que todo fue armado para que “extraños” o “ajenos al programa PANI” recibieran supuestamente los productos.

La recomendación al respecto señala que “En lo sucesivo, el INAN-PANI deberá implementar mecanismos efectivos de control en lo referente al cumplimiento estricto a las recepciones, conforme a lo establecido en el Contrato suscripto entre ambas partes”.

INEFICACIA EN LAS FISCALIZACIONES A LOS PROVEEDORES
Las autoridades del INAN responsables del programa nutricional también “incurrieron” en “conducta negligente” al no llevar a cabo tareas de control relacionadas al transporte de los productos, pese a que ello está reglamentado y su cumplimiento debía ser de carácter estricto.

“El INAN-PANI deberá realizar verificaciones aleatorias a las instalaciones y transporte de los proveedores, teniendo en cuenta lo establecido en la Ley N° 836/80 “Código Sanitario”, Libro II “De los Alimentos”, Título II, De los alimentos y su Higiene Capítulo III, De los Establecimientos de Alimentos, Artículo 166 “Los propietarios o representantes de establecimientos de alimentos, están obligados a permitir el acceso a los funcionarios competentes del Ministerio para realizar las inspecciones que consideren necesarias”, señala el informe.

FALTA DE DOCUMENTACIÓN DEL “RETIRO DE LA LECHE”
La auditoría también detectó que en el proceso de suministro de leche enriquecida, se incurrió en una deliberada falta administrativa relacionada a la ausencia de documentación que respalde el retiro de los productos para asistir a madres embarazadas y a niños desnutridos.

Es por ello que se refuerzan las presunciones de que lo productos nunca incluso llegaron a todas las beneficiarias del programa, esto, en caso de haber existido, de acuerdo con los datos. “Falta de documentación que respalde el retiro de leche enriquecida correspondiente al Lote N° 4L1009/15, de los servicios de Salud que recibieron el citado Lote”, dice para observación del equipo de auditores”, para inmediatamente consignar la recomendación de que “el INAN-PANI deberá fortalecer los controles procesuales de acuerdo a su naturaleza y características propias para el logro de una atención integral al beneficiario conforme al Artículo 3° de la Ley 4698 “De Garantía Nutricional en la Primera Infancia” y la Ley N° 836/80 “Código Sanitario”, Libro II “De los Alimentos”, Título II, De los alimentos y su Higiene Capítulo I, El Control de los Alimentos, Artículo 159 ‘El Ministerio realizará el control de los alimentos en sus aspectos higiénico-sanitarios, debiendo coordinar sus acciones con otros organismos del Gobierno y las municipalidades”.

Todo este apartado expuesto corresponde al ítem 10 de la Síntesis Ejecutiva en el marco de la auditoría.

“AUSENCIA DE FISCALIZADOR”
El ítem 12 del reporte ordinario revela que se confirmó la “ausencia de fiscalizadores del INAN y otras autoridades de la misma institución durante las entregas de leche en polvo enriquecida en los servicios de implementación del programa de asistencia”.

Este relato tiene que ver con la evidencia falta de fiscalizadores en los lugares donde el producto debía ser entregado, y luego redireccionado a los beneficiarios. “El INAN-PANI deberá implementar sistema de control oportuno y tomar los recaudos necesarios para que el Fiscalizador acompañe la recepción de la leche fortificada a fin de realizar la verificación efectiva de la cantidad, calidad y estado del bien recepcionado y dar cumplimiento a lo establecido en las disposiciones legales pertinentes.

En principio, las sospechas apuntan a que la directora de la institución, la Dra. Laura Beatriz Mendoza de Arbo, sería una de las supuestas principales responsables de las “falencias” descubiertas, y en su carácter de titular del ente, deberá “rendir explicaciones convincentes sobre el destino de los recursos empleados en el marco del programa INAN-PANi” y fundamentalmente sobre la utilización de los fondos destinados a la ejecución del plan.

Igualmente, las sospechas recaen en los beneficiarios, cuya cantidad posiblemente no se compadecería con la que realmente figura en los registros. “Estamos ante la posibilidad de una cantidad inflada de beneficiarios que en la realidad no existirían”, explicaron funcionarios de Salud al referirse a la investigación en etapa incipiente, revela Zeta.

INAN 2

Reproducción de una parte de la investigación publicada en la Revista Zeta sobre un presunto multimillonario negociado con leches que deben ser para niños desnutridos.