Imagen ilustrativa. GENTILEZA

Al inicio, la misiva indica: “ En nombre de la Comisión Especial de Hidroeléctricas Binacionales del Parlasur, Delegación Paraguay, tengo a bien hacerle llegar la preocupación de nuestra Comisión, de acuerdo a la reunión que hemos tenido en el día de 01 de julio del corriente año, en relación a la lentitud en ejecutar la infraestructura eléctrica necesaria para que el Paraguay pueda contratar toda la potencia y energía de Itaipú y Yacyretá en 2023, lo que le coloca a nuestro país en desventaja al momento de revisar el Anexo C de Itaipú”.

“En primer lugar, queremos llamar seriamente la atención de que la sincronía entre las centrales hidroeléctricas de Itaipú, Yacyretá y Acaray aún no se concreta, cuando que representantes del actual gobierno se comprometieron a tenerla a punto ya en mayo del 2020, hace más de un año” indica la misiva, al tiempo de afirmar que ahora, directamente los parlamentarios desconocen cuándo entrarán a operar sincronizadamente tales centrales hidroeléctricas. “El país pierde centenares de millones de dólares por año por esta falta de sincronización, según lo analizaron expertos y lo hemos denunciado en su momento”, prosigue. 

Del mismo modo, hacen alusión a las obras de infraestructura eléctrica de 500 kV en ejecución, que son (i) la subestación Valenzuela, (ii) la subestación Yguazú, (iii) la doble terna de 500 kV entre la SE MD de Itaipú y la SE Yguazú y (iv) el banco de reactancias en la SE Villa Hayes.

Sobre las mismas, subrayan que son absolutamente insuficientes para contratar el 100% de la potencia y energía que le corresponde al Paraguay de ambas binacionales y de disponer libremente de la energía que no consumimos y exportarla a terceros países si fuera conveniente; además, se tienen noticias de retrasos en estas obras. 

“En tercer lugar, por último, la ANDE prevé una doble terna de 500 kV entre la SE Yguazú y la SE Valenzuela, y una línea de 500 kV entre la SE Valenzuela y la SE Ayolas, que permitirían contratar el 100% de nuestra potencia y energía de Itaipú y Yacyretá, e incluso exportarla a terceros países (hoy el Brasil está pagando altísimos precios para importar energía, por la sequía, y nuestra energía de Yacyretá podría exportarse a un excelente precio), pero recién para terminarlas en el año 2027”, acotan los parlamentarios.

PARAGUAY DEBILITADO

Así, según argumentan que, al momento de la revisión del Anexo C (2023), los trabajos aún no estarían listos. “Hay que destacar que una línea de 500 kV se ejecuta en 18 meses y, como faltan 25 meses para agosto del 2023, aún hay tiempo –si bien cada vez más estrecho– para tener operando a tales líneas de transmisión”, precisan. 

Por las razones expuestas, solicitan al senador Enrique Bacchetta, presidente de la Comisión Nacional de Seguimiento de la Revisión del Anexo C de Itaipú, que consulte sobre estas deficiencias al presidente de la República, Mario Abdo Benítez.