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Por fin los seguidores azulgranas pueden respirar tranquilos. La noticia más esperada del verano para los culés, la continuidad de Messi, es cuestión de días... u horas. Ahora sí que es inminente. Este miércoles ya ha habido un principio de acuerdo. Ahora sólo quedan por solucionar los clásicos flecos burocráticos. No debería demorarse demasiado el anuncio.

El atacante ha aceptado una rebaja más que significativa del sueldo para poder seguir en el Barcelona. Y además, el argentino firmaría un contrato largo, de cinco temporadas. Gracias a estas dos variables, el club azulgrana podrá seguir disfrutando de Leo Messi. De todas formas, es muy probable que no cumpla la totalidad de la entente y que dentro de dos campañas ponga rumo a Estados Unidos, donde ejercería de embajador del club.

El futbolista siempre ha dicho que iba a priorizar un proyecto ganador, que le permitiese continuar añadiendo títulos a su extenso palmarés, a la parcela económica. Y, conocedor de la situación económica de la entidad, que tiene el límite salarial disparados, se ha rebajado la ficha a la mitad.

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