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Una profesión que viene de familia y que defiende a capa y espada: "La vida en el mar no es ninguna vergüenza, como mucha gente piensa. Es un trabajo como otro cualquiera. No solo eso. El mar es precioso y lo necesitamos, tiene que haber gente trabajando aquí y la profesión debe ser respetada como cualquier otra", comenta el exjugador en una entrevista para Empower Brand Channel, canal portugués de televisión.

Con el Real Madrid consiguió levantar dos Copas de Europa, dos títulos de Liga y una Copa del Rey, además de dos Supercopas de Europa y tres Mundiales de Clubes. Llegó en 2011 procediente del Benfica por 30 millones de euros. Después de su etapa como merengue, pasó como cedido por el Mónaco y el Sporting de Portugal, para finalmente recalar en su último club: el Rio Ave. Su siguiente paso ha sido alejarse del mundo del esférico y los focos siendo armador de barcos. Su primer barco pesquero lo compró cuando estuvo en el Real Madrid.

"La gente que ama el mar y que quiere vivir la experiencia del mar necesita seguir su voluntad, su sueño. Es un trabajo también para las nuevas generaciones. Mi padre tenía un barco, se dedicaba a la pesca y siempre iba con él de pequeño. Mi vida era el mar: el mar y pescar. Por supuesto, sabía que el fútbol un día acabaría y que debería tomar una nueva dirección en mi vida. Y mi felicidad es esta embarcación y esta es la vida que quiero llevar", finaliza.

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