Imagen ilustrativa. GENTILEZA

Desde 2018, en su estrategia de diversificar mercados para sus productos, Paraguay ha logrado reducir su dependencia del mercado ruso en cuanto a las exportaciones pecuarias, destacó el presidente del Senacsa, José Carlos Martin Camperchioli.

El presidente del servicio oficial pecuario destacó que, pese que sigue siendo el segundo mercado más importante para las exportaciones bovinas, Rusia tiene actualmente un peso menor en el volumen total de las exportaciones bovinas, ya que Paraguay logró diversificar sus destinos.

Actualmente, del total de 2.000 millones de dólares que Paraguay obtiene de su exportación pecuaria, el mercado ruso consume un volumen equivalente a 380 millones de dólares, mediante la adquisición de productos como carne bovina, menudencias, leche en polvo, grasa y otros sub productos.

«La tendencia es cada vez menor dependencia de ese mercado ya que hace tres años el mercado ruso representaba cerca de 800 millones de dólares, indicó el presidente de Senacsa en entrevista con la radio Abc Cardinal.

«Hoy solamente dos empresas frigoríficas están operando con el mercado ruso», remarcó. Sin embargo, para Rusia el principal proveedor de carne sigue siendo Paraguay.

Desde la semana pasada los exportadores paraguayos han suspendido los envíos a Rusia por la incertidumbre generada respecto a la posibilidad de pago que tendría ese país, una vez que se aplicaran las sanciones internacionales como consecuencia de su ataque militar en Ucrania.

«Esa incertidumbre se termina confirmando hoy con la exclusión de Rusia del sistema de transferencias a nivel mundial», indicó Martin. Sin embargo, al momento de darse esta confirmación, unos 150 contenedores de productos paraguayos enviados a finales de enero se encontraban todavía en tránsito hacia ese mercado.

El volumen de productos tendría un valor de alrededor de 30 millones de dólares que los exportadores estaban tratando de asegurar desde la semana pasada.

Según Martin Camperchioli, todavía está por confirmarse la posibilidad de cobro de esos envíos ya que hay importadores rusos que tienen subsidiarias en Europa e incluso en EE.UU., que no han sido cesadas, y que podrían pagar a través de esos países. IP