La triste noticia fue dada por el doctor Pío Alfieri, director del Hospital Pediátrico Niños de Acosta Ñu, quien confirmó el niño de 11 años falleció este lunes minutos después de las 10:00. Jesús Leiva fue ingresado al centro asistencial el 24 de mayo pasado con un cuadro de shock séptico por neumonía. Al día siguiente, en horas de la mañana, el niño sufrió un paro cardiorrespiratorio del que pudieron salvarlo; sin embargo, desde entonces no logró salir a flote a pesar de los esfuerzos del equipo médico que lo trataba.

El cuadro de Jesús fue empeorando. La semana pasada, cuando cumplió 11 años estando internado en cuidados intensivos del Acosta Ñu, precisó asistencia cardiorrespiratoria (ECMO), por lo que aumentó la cantidad de hemoderivados que debía recibir y los médicos pidieron como regalo de cumpleaños que la gente done sangre en su nombre.

El caso del pequeño saltó a la luz por la necesidad de un trasplante del corazón, ya que padecía miocarditis dilatada. Fue el primer paciente en recurrir al corazón artificial, el Berlin Heart, que lo ayudó a aguantar la espera por un donante de corazón. Finalmente, el niño fue trasplantado en noviembre de ese año y para su mejor recuperación se le otorgó una casa a su familia, que es de escasos recursos.

Cuando fue internado en esta ocasión, la doctora Nancy Garay explicó que el problema no fue el trasplante lo que hizo él niño muriera sino las complicaciones por la neumonía. Afirmo la profesional que no quiere que gente piense que no vale la pena trasplantar. Además afirmó  que en el caso de Jesús hubo una denuncia de hace varios meses de parte del Servicio Social del Hospital a la Codeni de Limpio, porque los médicos percibieron que él no estaba recibiendo los cuidados que necesitaba.

Hasta el momento ni la Codeni ni la Secretaría de la Niñez han dado la cara sobre el caso que finalmente derivó con una muerte que según los propios médicos era evitable.