Miles de venezolanos cruzan todos los días la frontera con Colombia en busca de alimentos y medicina.

"Ya no hay nada acá, lo que hay es hambre", dijo un contrabandista, al tiempo de indicar que Colombia está salvando a la gente. Los productos de contrabando en su mayoría alimentos, medicinas y productos de higiene básica son comercializados en las zonas fronterizas e incluso llega a la capital del país, Caracas.

El presidente Nicolas Maduro había ordenado el año pasado el cierre de los cruces fronterizos con la intención de evitar el contrabando, pero la crisis económica obliga a sus habitantes a arriesgar sus vidas cruzando en canoas, nadando e inclusive sobornado a los funcionarios para llegar al otro lado.

Un constructor venezolano, que ahora usa su moto para el traslado de alimentos, indicó que es mas rentable el negocio del contrabando que hacer largas filas por horas y con frecuencia terminar con las manos vacias. 

La oposición está presionando para que sea convocado un referendo revocatorio que recorte el mandato de Maduro, alegando que es la única vía para evitar una crisis humanitaria.