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"Tampoco es que las lágrimas rodaran por mis mejillas después de la final del Mundial, pero le pude animar como un cachorro porque Messi lo había logrado. Estuve viendo la final entre Argentina y Francia, principalmente como seguidor de Messi. Creo que obtuvo lo que se merecía", dijo Rijkaard, que se retiró de los banquillos en 2014 tras entrenar a la seleccion de Arabia Saudí, en 'Helden Magazine'.

El entrenador holandés contó cómo fue su particular reencuentro con Leo Messi en 2017: "Mi hijo Santi tenía muchas ganas de ver un partido del Barcelona. Yo no era muy aficionado a los estadios en ese momento. Conseguí las entradas a través del delegado del equipo, Carles Naval. Carles dijo: "Entonces ven a un entrenamiento". Messi fue súper agradable y accesible. Nos abrazamos y nos hicimos fotos. Eso fue, por supuesto, especialmente divertido para mi hijo. Cuando volví a encontrarme con Messi después de mucho tiempo, me hizo sentir algo especial. Se ha convertido en la gran estrella que todo el mundo del fútbol está mirando con la boca abierta".

Frank Rijkaard en 'Helden Magazine': "En realidad, soy un poco extraño y tengo un carácter complicado"
Rijkaard reconoció que "no soy muy fan de dar entrevistas. Tampoco me gustan mucho las cámaras que me apuntan. Pero estas son cosas que me siento obligado a hacer de vez en cuando. Por cierto, 'obligatorio' no es la palabra adecuada. Porque al igual que Johan (Cruyff), también hago las cosas con el corazón, de lo contrario, realmente no lo haría".

En su charla con Helden Magazine el ex jugador neerlandés de Ajax, Sporting de Portugal, Zaragoza y AC Milan se definió personalmente: "En realidad, soy un poco extraño. Puede que lo haya logrado como jugador de fútbol, pero eso no era del todo obvio porque tengo un carácter complicado. No me gusta mucho el foco de atención. Siempre me cuesta estar de pie en medio de una habitación, prefiero estar de pie con la espalda contra la pared. Eso es lo que soy. Me siento muy bien con ese papel en el refugio".

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