Viñas Cue sigue siendo una caja de Pandora difícil de abrir.

Sin embargo, hasta julio del 2023 no hubo imputación alguna. Indicó que defensores públicos de distintas partes del país recogieron los testimonios y presentaron las denuncias correspondientes, pero quedaron hasta ahí. Segovia en contacto con un medio señaló que “la impunidad de violaciones DDHH no puede continuar”.

Lo ocurrido en la cárcel de Viñas Cue se suma a la larga lista de casos que van camino al opa rei. En agosto de este año se denunció hechos de maltrato, tortura psicológica y arrestos arbitrarios dentro de la prisión militar donde 16 funcionarios de las FF.AA aseguraron ser las víctimas. El Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura remitió un informe a la Justicia Militar dando un resumen de lo acontecido.

Aún así no han existido respuestas. Tanto el coronel José Daniel Flor Sánchez, director del reclusorio y el mayor Guillermo Moral, director del área penal son los apuntados en la causa. Sobre este último pesa un sumario interno, pero desde las filas castrenses informaron que en más de dos meses, el procedimiento de “investigación” continua. El silencio cómplice en las FF.AA buscando defender a los que ocupan cargos de relevancia, son una constante.

Flor teniendo antecedentes por denuncias similares y siendo tildado de vengativo por sus víctimas sigue en el cargo de la prisión militar teniendo bajo su yugo a quienes son considerados potenciales víctimas. Segovia pidió que se cumplan estándares de investigación, entre ellos el registro adecuado de lesiones. “También que las causas sean calificadas como tortura cuando amerite y no como lesión en el ejercicio de las funciones públicas, como ocurre habitualmente”, agregó. Cabe recordar que Paraguay fue condenado por la Corte IDH detención ilegal, tortura y violación tanto de las garantías judiciales como de la protección judicial, que ocurrió cuando Walter Bower era ministro del Interior en el 2000.