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Tres policías fueron detenidos e imputados ayer por supuestamente haber “plantado” drogas en el vehículo de un chofer de Bolt, a quien le habrían sacado unos G. 5 millones para liberarlo.

Los policías procesados son el oficial inspector Cristhian Fabián Rodríguez, de 34 años; suboficial primero Marcelo Barrios, de 30 años, y suboficial ayudante Alejandro Carlos Eduardo Rocca Osorio, de 27 años, todos personales de la comisaría 2ª de Asunción, con asiento en el barrio Tacumbú, cuyo jefe es el comisario principal Francisco Colmán.

El fiscal de Antisecuestro, Federico Tadeo Delfino Ginés, imputó al oficial y los dos suboficiales por extorsión, asociación criminal y privación ilegítima de libertad.
Fue luego de que los efectivos se dieran por detenidos en la Dirección de Policía de Asunción, que funciona en la misma sede que la comisaría 3ª, en el microcentro.

El agente Rocca ya tiene un antecedente reciente por extorsión, apenas del año 2023 en Paraguarí, caso que está aún en investigación y por el que en teoría no podía portar armas de fuego.

La historia
Esta historia se inició el 31 de diciembre pasado, cuando un chofer de Bolt y Uber, identificado como Juan Guillermo Aranda Gómez, de 62 años, fue contratado por un cliente, un tal Víctor Manuel Dávalos, para un viaje desde la ciudad de Fernando de la Mora hasta el barrio Sajonia de la capital.

Según denunció Aranda, cuando llegaron a Sajonia, específicamente a la avenida Mallorquín, detrás del supermercado Superseis, fueron interceptados por una patrullera de la comisaría 2ª de la cual bajaron quienes serían el suboficial primero Barrios y el suboficial ayudante Rocca. La víctima identificó a estos por los portanombres y presillas de grado que llevaban.

Supuestamente, los policías acusaron inicialmente al chofer y su pasajero de estar alcoholizados y los amenazaron con hacerles el alcotest.

Luego les anunciaron que tenían que revisar el vehículo, un Kia Rio año 2009, tras lo cual el conductor empezó a filmar el procedimiento, ante el temor justamente de que le “plantaran” evidencias.

Efectivamente, en la “revisión” el policía Rocca dijo que encontró una bolsita que tenía cinco pastillas y que supuestamente eran drogas.

Con ese panorama, los policías trasladaron al chofer y al pasajero, así como el vehículo de estos, hasta la comisaría 2ª que queda en Portugal casi avenida Colón.

Ya en la sede policial, apareció supuestamente el oficial inspector Rodríguez, quien fue identificado por la víctima de la misma manera que los dos anteriores.

Los policías supuestamente en todo momento trataron con prepotencia al conductor y, llamativamente, el que era el pasajero desapareció del lugar.

Se cree que este último estuvo confabulado con los policías para sacarle dinero al conductor. Al menos hasta anoche seguía prófugo.

Esposa e hijo
Los uniformados le pidieron G. 3 millones al conductor Aranda para liberarlo, tras lo cual el señor llamó a su esposa e hijo quienes le llevaron todo el dinero que pudieron conseguir, que fue de G. 2 millones.

El chofer de plataforma también tenía dinero en sencillo en su riñonera, que era para el vuelto de sus pasajeros, pero los policías también se quedaron con esa plata, según la denuncia.

Tras ser liberado y convencido por su familia, el conductor se animó a hacer la denuncia ante el departamento Antisecuestro, cuyos agentes procesaron la información y finalmente recomendaron al fiscal Delfino la detención de sus colegas, que fue materializada ayer.

Los tres efectivos detenidos responderán al proceso desde la Agrupación Especializada.

Fuente ABC COLOR