Los tres policías que estarían involucrados directamente en el hecho.

El oficial primero Gustavo Narváez y los suboficiales Petrona Ovelar y Arnaldo Lezcano fueron imputados por el hecho punible de coacción grave, sin mulación de hechos punibles, privación ilegítima de libertad y posesión de estupefacientes. El fiscal del caso, Isaac Ferreira, pidió prisión preventiva para los tres.

Por su parte, el comisario principal Sergio Paredes Vera, jefe de la comisaría, fue imputado por producción de documentos y por la producción de coacción grave. El agente del Ministerio Público solicitó arresto domiciliario para el mismo, ya que aparentemente no participó directamente del procedimiento, según los datos.

Los uniformados fueron denunciados por la joven empresaria Tanya Villalba de "plantar" 300 gramos de cocaína en su vehículo, luego de detenerla y requisarla de manera ilegal el martes a la tarde, en Asunción.

Conforme a los datos, la afectada fue obligada a ingresar a un callejón, donde uno de los policías habrían colocado en el rodado un paquete de la droga. La joven filmó parte del procedimiento, que le permitió a la Fiscalía determinar la presunta responsabilidad de los agentes.