Piden un trato más humano para formación médica, tras muerte de residente
La repentina muerte de un joven médico residente ha conmocionado al sector de salud y reavivado el debate sobre las condiciones laborales de los profesionales en formación.
El Dr. Arturo Portillo, cirujano y médico internista, lamentó profundamente el hecho y expuso la realidad que enfrentan los residentes en los hospitales públicos del país.
“El muchacho tenía 26 años, se recibió seguramente a los 24 o 25 años. Obviamente, estando como R2, la carga y responsabilidad que tenía, más todavía en un hospital como el Hospital del Trauma, no me quiero imaginar la presión que tenía el chico”, expresó el Dr. Portillo.
El especialista señaló el agotamiento físico y mental que enfrentan los médicos residentes, especialmente tras extensas jornadas de guardia, muchas veces sin pausas ni condiciones adecuadas de descanso.
“Es una situación que venimos arrastrando desde hace años. La formación médica es exigente, pero no puede hacerse a costa de la salud de los propios médicos”, afirmó.
El médico Marcelo Esteban Barrios Espínola falleció en la mañana del 1 de mayo cuando iba a una guardia. Según refieren personas cercanas, el joven llevaba más de 35 horas sin dormir, debido a la carga horaria que se le imponía.
