Abogada sobre juzgado de la familia: «Todos vamos a terminar pagando las decisiones erradas del Congreso»
La abogada Alejandra Peralta Merlo se refirió a la aprobación de la creación de «Juzgados Especializados en violencia familiar» en el Senado y no específicamente en violencia contra la mujer como estaba establecido en el proyecto original.
«Es muy penoso que hoy, teniendo un juez paraguayo en la Corte Interamericana, nuestros legisladores simplemente emitan resoluciones tan desapegadas de la realidad de todo el continente, tan desapegadas de la realidad que se vive en este país con la extrema violencia hacia las mujeres», indicó.
«Preocupa esto porque finalmente la responsabilidad va a ser del Estado paraguayo. Todos nosotros vamos a tener que pagar en algún momento con nuestros impuestos estas decisiones erradas que están tomando desde el Congreso», añadió, enfatizando que la creación de Juzgados especializados es constitucional y no hacerlo atenta contra el artículo 46.
Así pues, destacó la importancia de la creación de tribunales con enfoque especializado, como ya ocurre en otros países. Para ella, es esencial para garantizar que, por ejemplo, los casos de feminicidio se manejen con la seriedad y la perspectiva de género que requieren.
En ese sentido, cabe mencionar que desde la promulgación de la ley 5777, que tipifica el feminicidio como un delito específico, se ha registrado un aumento continuo de casos de feminicidio año tras año en el país. Esta ley, que fue diseñada para ofrecer un marco legal más preciso y severo para la sanción de estos crímenes, no ha logrado reducir estos actos, según expertos.
La abogada especialista en Derechos Humanos, explicó que el feminicidio no es simplemente el asesinato de una mujer, sino que involucra elementos fundamentales que lo distinguen.
«El feminicidio requiere ciertos elementos: que la mujer sea asesinada por el hecho de ser mujer, lo que implica que el agresor debe verla como un objeto sobre el cual tiene poder. Es un crimen que refleja una relación de dominio, de control y de deshumanización hacia la víctima», explicó Peralta Merlo.
Este tipo de violencia tiene raíces profundas en estructuras patriarcales que persisten en la sociedad, donde la vida de las mujeres es vista como desechable. A pesar de los avances legislativos, la especialista subraya que las políticas públicas siguen siendo insuficientes para frenar este fenómeno.
