“Paraguay me rompió y me volvió humano”
En la antesala del partido decisivo ante Ecuador, el entrenador de la selección paraguaya, Gustavo Alfaro, vivió uno de los momentos más emotivos desde que asumió la dirección técnica de la Albirroja.
El DT argentino, visiblemente conmovido, dejó escapar lágrimas al hablar de su vínculo con el país y del apoyo recibido en cada etapa, incluso en los momentos más difíciles.
“Tenía la piel de cocodrilo, decía yo, no hay flecha que me entre… hasta que llegué a Paraguay. Paraguay me rompió esa estructura y me volvió un tipo muy vulnerable, muy humano. Uno se conmueve mucho con los gestos de amor y humildad de toda la gente”, expresó con la voz entrecortada.
Alfaro contó que para el duelo decisivo tendrá a sus familiares más cercanos en la tribuna, pero subrayó que es él quien debe agradecer al pueblo guaraní por el cariño recibido:
“En lugar de recibir las gracias, soy yo quien debe agradecer al pueblo paraguayo por brindarme calor incluso en los peores escenarios”, sentenció el entrenador.
Con la emoción a flor de piel, Alfaro dejó claro que su conexión con Paraguay trasciende lo deportivo: se transformó en un vínculo humano, profundo y sincero.
