Peña frente al espejo: ¿promulgará la ley que sepulta la transparencia?
El presidente Santiago Peña tiene en sus manos la polémica Ley de Protección de Datos Personales, que podría convertirse en el “tiro de gracia” para el acceso a la información pública. Aunque el proyecto fue aprobado por el Congreso, el artículo 24 —que exige permiso de funcionarios para acceder a datos públicos— amenaza con desmantelar la Ley de Transparencia vigente.
Peña, quien hace un año prometió ante un foro internacional “luchar hasta el último día” por la transparencia, deberá decidir si promulga o veta la norma. Su coherencia está en juego: lo que dijo en el Foro Global sobre Transparencia choca con el silencio actual frente a una ley que puede blindar la opacidad estatal.
La Constitución le otorga 20 días hábiles para tomar postura. Si no objeta ni devuelve el proyecto, quedará automáticamente promulgado.
