Lilian Samaniego se reunió con presidenta del Palmeiras buscando armonizar ida de cerristas a Brasil
En un gesto de hermandad deportiva y diplomacia institucional, la senadora paraguaya Lilian Samaniego se reunió con Leila Pereira, presidenta del club Palmeiras de Brasil, para enviar un mensaje conjunto a favor del respeto, la inclusión y la convivencia pacífica en el deporte.
«El fanatismo deportivo es diversión, pasión, y nunca violencia. La discriminación no es un juego, ni un deporte», expresó con firmeza la senadora. «El deporte une a las personas. El deporte no es violencia».
Durante el encuentro, Samaniego manifestó su deseo de que «la familia cerrista pueda viajar a Brasil, y que la hinchada del Palmeiras sea recibida con los brazos abiertos en Paraguay». Agregó: «Estoy aquí para expresar mi respeto y poner el foco en lo que debe ser un encuentro deportivo: una fiesta. Jamás hemos sido un país racista y nunca lo seremos».
Por su parte, Leila Pereira aseguró que da todas las garantías para que la hinchada de Cerro Porteño pueda asistir al partido del próximo 9 de abril, destacando su compromiso con un ambiente seguro y festivo. Además, manifestó que comparte plenamente la visión de la senadora Lilian Samaniego: el deporte debe ser una fiesta.
Refiriéndose a declaraciones desafortunadas que circularon recientemente, Samaniego fue categórica: «Las expresiones de un hincha o de un dirigente no representan lo que somos. Paraguay es un pueblo pacífico y respetuoso. Ciertas expresiones no reflejan el sentir de nuestra gente».
Ambas coincidieron en que el racismo debe ser combatido en todas sus formas. «El racismo no es un chiste de mal gusto ni un error. Es una expresión que ha causado mucho daño a lo largo de la historia. Es violencia, no una diferencia deportiva», afirmó Samaniego.
La senadora también destacó que Brasil tiene un compromiso firme con la erradicación del racismo e instó a Paraguay a acompañar ese camino con igual determinación: «Somos pueblos hermanos que queremos disfrutar del deporte. El fanatismo no es racismo».
Para cerrar, subrayó el papel transformador del liderazgo femenino en momentos de tensión: «A veces las mujeres estamos más preparadas para el diálogo, y yo siempre he sido una persona que construye puentes, no que los derriba».
«La familia cerrista es una gran familia y esperamos a toda la hinchada del Palmeiras para vivir juntos una verdadera fiesta del fútbol», concluyó.
