Municipio de San Bernardino no registra mansión de Santiago Peña
A pesar de que ya está edificada y habitada, la lujosa casa de verano del presidente Santiago Peña no aparece en los documentos oficiales de la Municipalidad de San Bernardino. La omisión quedó en evidencia con la Resolución N.º 69/2025, emitida por la Intendencia el 31 de enero, donde se aprueba el fraccionamiento del conjunto inmobiliario “Las Piedras-Ciervo Cuá Emprendimientos” sin registrar construcción alguna.
La contradicción es evidente: al momento de emitirse dicha resolución, la residencia ya estaba finalizada y ocupada. Medios lo habían documentado días antes, el 27 de enero de 2025, con fotografías y reportes desde la cima de la cordillera de los Altos, en un área de protección ambiental del lago Ypacaraí.
El proyecto urbanístico aprobado contempla 31 lotes repartidos en seis manzanas. Según el documento firmado por el intendente cartista Emigdio Ruiz Díaz, ninguna de esas parcelas cuenta con edificaciones. Pero en uno de esos lotes –el N.º 2 de la Manzana D– se ubica precisamente la vivienda del presidente.
Peña había declarado en agosto de 2023 que poseía 5.016 metros cuadrados sin construir. No obstante, los documentos oficiales detallan que, sumando áreas comunes, su superficie real asciende a 7.164 m², representando un 5,08% del total del fraccionamiento, que cubre unas 14 hectáreas.
Otro punto clave es la falta de licencias previas. La Declaración de Impacto Ambiental (DIA) fue expedida recién el 29 de enero de 2025, por el Ministerio del Ambiente (Mades), cuando la obra ya estaba concluida. La Ley 294/93 exige este documento como requisito obligatorio antes de iniciar cualquier construcción de este tipo, especialmente en zonas protegidas.
Además, la Ley 5256/14 señala que la zona del lago Ypacaraí es un área silvestre protegida, lo que vuelve aún más cuestionable la ejecución de un proyecto inmobiliario de estas características sin la debida aprobación ambiental previa.
La Junta Municipal de San Bernardino otorgó su visto bueno definitivo recién el 12 de marzo de este año, más de un mes después de haberse revelado públicamente la existencia de la mansión.
En síntesis, la casa del presidente fue construida sin que se haya aprobado previamente el fraccionamiento ni se contara con los permisos ambientales requeridos. La Municipalidad no la reconoce oficialmente, pese a que su existencia está ampliamente documentada. Ahora se espera una respuesta institucional ante las inconsistencias legales y administrativas que rodean al caso.
