Escándalo por pupitres de Itaipú: «Ni Dios, ni Patria, ni Familia… solo negocios y amigos», afirma diputado

El diputado Raúl Benítez lanzó fuertes acusaciones en el pleno de la Cámara de Diputados sobre la reciente licitación de pupitres chinos realizada por Itaipú, denunciando direccionamiento, sobrecostos y vínculos políticos con el empresario Long Jiang.
En su intervención, Benítez desmontó los argumentos que justificaban la compra de pupitres fabricados en China en detrimento de la industria nacional. «Nos vendieron la mentira de que el pupitre chino es de mejor calidad, pero la realidad es otra. La estructura metálica es más fina, los accesorios son importados y las reposiciones serán prácticamente imposibles de conseguir localmente», aseguró.
Licitación sospechosa y facturas a medida
El legislador expuso una presunta maniobra para favorecer a una empresa extranjera en la licitación, afirmando que la firma adjudicada «mágicamente» cumplió con los requisitos de experiencia el mismo día en que se lanzó la licitación.
«Las facturas que demuestran su experiencia son del 29 de noviembre, el mismo día en que se publicó la licitación. ¿Casualidad? No, esto fue direccionado para excluir a empresas nacionales con más de una década en el rubro», sostuvo.
Además, denunció un escandaloso sobrecosto en la compra de los pupitres chinos: «Se adquirieron por 15 dólares y se pagaron 96 dólares. Itaipú nos quiere hacer creer que esto significó un ahorro».
Vínculos políticos y negocios turbios
Benítez fue aún más lejos al señalar conexiones entre altos funcionarios del Gobierno y empresarios chinos, insinuando que el favoritismo hacia la empresa asiática no fue una simple casualidad.
«Aparentemente el amor por Taiwán es por las donaciones, y el amor por la China comunista es por los negocios», lanzó en tono irónico. También mencionó posibles nexos del vicepresidente de la República Pedro Alliana con el dueño de la empresa adjudicada y de un intermediario vinculado al presidente Santiago Peña, este se trata de Blas Pereira, declarado como un «monje negro» en Itaipú.
El diputado cerró su intervención exigiendo transparencia y revelando que la resolución que ordena la compra de los pupitres aún no ha sido publicada, pese a que debería contar con la firma del director de Itaipú y los consejeros.
«Todos los perros están involucrados y nadie dice nada. Queremos saber quiénes firmaron el acta, y esa información debe ser pública. Esto fue un negociado descarado. Ni Dios, ni Patria, ni Familia… solo negocios y amigos», disparó.