Prisión preventiva para Alexandre Rodrigues Gomes por frustrar comiso de bienes
La juez Rosarito Montanía decretó la prisión preventiva de Alexandre Rodrigues Gomes, hijo del fallecido exdiputado Eulalio Gomes, en la causa que afronta por la presunta transferencia irregular de bienes que estaban con medidas de carácter real en el marco del proceso derivado del operativo Pavo Real II.
Rodrigues Gomes está procesado por la presunta comisión de los hechos punibles de lavado de dinero, producción inmediata de documentos públicos de contenido falso y uso de documentos públicos de contenido falso. La medida fue dispuesta este 02 de octubre, tras una audiencia telemática en la que intervinieron los fiscales José Martín Morínigo, Alejandro Cardozo Pereira, Francisco Cabrera y Diana Gómez, quienes ampliaron la imputación contra el procesado.
La acusación sostiene que Rodrigues Gomes habría participado en maniobras destinadas a transferir vehículos e inmuebles, pese a que sobre él pesaban medidas cautelares de inhibición general de enajenar y gravar bienes, decretadas en el marco de la causa conocida como “Pavo Real” que investiga hechos de narcotráfico y lavado de activos.
Según la Fiscalía, el imputado recurrió a escribanas públicas y terceros de confianza para simular operaciones de compraventa y así dar apariencia de legalidad a transferencias que buscaban ocultar el origen ilícito de los bienes.
Durante la audiencia el abogado Víctor Raúl González Monges, manifestó que su defendido actuó “de buena fe” y que en las fechas señaladas se encontraba recluido, incomunicado y atravesando la muerte de su padre. Alegó que no tuvo posibilidad de manipular registros ni ordenar transferencias y que las operaciones cuestionadas contaban con documentación formalizada ante notarios.
No obstante, la magistrada consideró que existen elementos de convicción suficientes sobre la existencia de los hechos punibles investigados, así como indicios de la participación de Rodrigues Gomes en calidad de instigador. Además, destacó que la expectativa de pena en caso de condena podría llegar a siete años y medio de prisión, lo que eleva el peligro procesal de fuga y obstrucción de la investigación.
El tribunal recordó que la investigación fiscal se encuentra en etapa incipiente y que persisten riesgos de alteración o destrucción de pruebas, así como de influencia indebida sobre testigos y coimputados. En consecuencia, se concluyó que la prisión preventiva es la medida más adecuada y proporcional, dado que otras alternativas no garantizarían la eficacia del proceso.
Rodrigues Gomes ya cumple prisión preventiva en otra causa vinculada al crimen organizado, por lo que la resolución ordena su continuidad en la Penitenciaría Regional de Encarnación Cereso, bajo libre comunicación y a disposición del juzgado.
La Fiscalía deberá ahora profundizar la recolección de pruebas para determinar la responsabilidad penal del imputado y de otros presuntos involucrados.
